Ya tenía ganas de hablarles de este tema. La realidad aumentada lleva muy poquito entre nosotros y todavía el gran público no la conoce. Pero todo tiene remedio. De aquí no sale nadie sin entender el asunto. Y si me apuran, hasta con alguna demo en el móvil o tableta.
Imaginen un agradable paseo por el monte. Llegan hasta un mirador y se acercan al panel en que se muestra la imagen de la sierra que les queda enfrente. Se agradece que hayan colocado el nombre de cada pico en su posición correspondiente, incluso las carreteras y pueblos. Eso es realidad aumentada. Ahora dirán: ¡pues vaya chorrada!… y razón no les falta. Pero vamos a mejorar un poco la experiencia. Uno de los veteranos, Google Sky Map ya bordeaba el concepto y mostraba mapas estelares hace unos añitos:
Para los que estrenábamos precisamente ese móvil, Sky Map era pura ciencia ficción hecha realidad. Y continuamos de sobresalto en sobresalto, ya que poco tiempo después, llegó la auténtica realidad aumentada. Echen un vistazo:
La primera vez que probé Layar, pensé en magia o brujería (cuánta razón tenía el tío Arthur). En Layar son pioneros en el desarrollo de contenido que aumenta la realidad. De eso se trata, de añadir información extra sobre la realidad. ¿Qué tipo de información?. De todo tipo. Como han visto, comenzaron con museos, monumentos… una suerte de puntos de interés (POIs en la jerga de los navegadores) que han ido enriqueciendo con el tiempo. La gracia está en que allá donde apuntemos con el móvil, gracias al GPS y la brújula digital nos pintará aquellos que estén a tiro. Muchas empresas han visto en este soporte la oportunidad ideal de promocionarse. Comprueben como ha evolucionado la aplicación y las posibilidades de publicidad que ofrece hoy día:
Vaya cambio, ¿eh?. En cierto modo, esto de la realidad aumentada me resulta similar a los famosos códigos bidi que ahora nos inundan. Hace unos años eran la última tendencia en Japón, y ahora los tenemos tanto en los yogures como en la prensa y cientos de anuncios por doquier. Esos códigos de barras evolucionados encierran cierta información que un programa entrenado puede descodificarnos sin problemas. En cierto modo, las siguientes aplicaciones son una vuelta de tuerca a ese concepto. Imaginen un patrón geométrico dibujado en blanco y negro, que se vea bien. Algo como esto:
Ahora, si tienen la suerte de contar con un teléfono Android a mano, descárguense de Google Play este programita. Se llama UnifeyeDemo y les va a sorprender seguro. Abran el programa y apunten la cámara de fotos al dibujo de arriba. ¿A que mola?. Si juguetean cambiando el ángulo, acercándose, girando… verán que el personaje parece anclado a la imágen. Ese patrón, conocido por el programa, cuenta con unas marcas que le sirven de guía. Si acercamos o alejamos el dibujo, o giramos a su alrededor, los ángulos y perspectivas cambian, el programa recalcula continuamente su posición y redibuja al suerhéroe para dar esa sensación espectacular de tridimensionalidad. Pueden ponerle el dedo encima, se mueve y hasta hace ruiditos… Si se imprimen el dibujo y lo sostienen sobre la palma de la mano, el efecto es muy divertido.
Como no, lo siguiente es probar algún jueguecillo que haga uso de esta tecnología. Descubrí AR Blitz, pero me quedé con las ganas. No hay manera de encontrarlo en Google Play.
Ni corto ni perezoso, me puse en contacto con sus programadores. Unos checos cuya empresa, brosvision, apuesta fuerte por la realidad aumentada. Me han comentado que el juego ha sido retirado porque no tenía compatibilidad con las últimas versiones de Android, pero que esperan solucionarlo y volverlo a liberar. Estaremos al tanto. Mientras, os recomendo una demo muy resultona que sí está disponible. Se llama handsonAR y te permite comprobar lo bien que te sentarían los últimos móviles del mercado en tu mano:
Para que prueben a gusto, les dejo con un par de aplicaciones para trastear: Augment y AndAR. Tienen multitud de objetos para mostrar, en incluso se pueden cargar los de cosecha propia.
Ahora que ya controlamos del tema, y como ya sabrán los que me lean habitualmente (gracias, mamá), dejamos para el final las marcianadas que adelantan un futuro entretenido. Vean de lo que son capaces si les dejan cacharrear lo suficiente:
Cuentos interactivos:
Tarjetas de visita:
Clases de anatomía:
Anuncios de coches:
Dobles virtuales:
Y juegos, muchos juegos:
Prepárense, porque la realidad aumentada no ha llegado todavía y ya está cambiando el modo de ver el mundo. Por ahora sigue siendo necesario un teléfono, tableta u ordenador, pero el día que las gafas lleven incluidas pantallas de video… ¡¡¡brrrrrrrrr!!! me dan escalofríos.